No quiero pensarte,
me dueles demasiado.
No quiero esperarte,
no quiero escribirte.
No quiero intentar
que me eches de tu lado.
Mis palabras son mudas,
con ellas te hablo,
y me refugio en sonrisas
para ocultar el llanto.
Pero acabo cediendo
y te pienso, y no quiero,
y me permito dos lágrimas
que se secan tan rápido…
Y sonrío y te pienso,
y me dueles por dentro,
y me acabo olvidando
de que no quiero, no quiero…
2 comentarios:
Estando yo en mi depresión
veo tu musa llegar
entonces sabre dominar
esta tierna pero dura
inspiración.
Jorge
Muchas gracias Jorge por asomarte a mi universo... y por participar en él!
Un besito,
Yrene.
Publicar un comentario